Tristemente, me veo reflejado en vuestras palabras, no solo por lo que hemos hablado sino por todo lo que me guardo hasta que una incisión inesperada agrieta las rutinas de mi supervivencia y por esa rotura escapa todo. A presión. La jornada partida, la ausencia de tiempo real que dedicar a las cosas que me ilusionan, la falta de energía para buscar esas ilusiones que terminan por convertirse en tareas, la duda entre cuánto aguantaré en este curro cada día más estúpido y si estoy dispuesto a renunciar a este dinero. Todo en pendiente, pospuesto, ya leeré esto cuando tenga tiempo, ya haré esto cuando me vaya de casa, ya nos veremos. Darle largas a la vida es supervivencia, porque mirarla de frente es combatir y no todos estamos preparados para eso. No tendría que ser todo una batalla. Por suerte, estoy rodeado de personas que me quieren a pesar de las distancias, de llegar tarde, porque en el fondo estamos todas igual. El amor nos salva, siempre.
Últimamente me cuesta mucho escuchar música, pero siempre me entra fácil el BBO de Hoke (un disco que es casi un speedrun, capaz de hacer mucho con muy poco, que alterna energía y estrés con pausas para tomar aliento), y no puedo evitar pensar en la canción "Automático", cuando dice eso de "necesito tiempo, dámelo en metálico". Dejo mi pequeño aporte musical y os recuerdo cuánto os quiero y cuánto me gusta leeros. Siempre os siento cerca, pero así más todavía.
Justo hoy una amiga me decía "ahora entiendo cuando éramos pequeñas y los mayores nunca veían a sus amigos, estaban siempre cansados y no tenían tiempo". Y no, no es por ser mayores, es como decís y como he leído en comentarios, que este modo de organización social obliga a desconectarse a veces de una misma para poder cumplir con esa productividad, con eso que se espera de nosotras, eso que hemos integrado como nuestro pero en realidad es mentira. Entonces, paramos, respiramos, nos autocuidamos y cuidamos entre nosotras, y desde ahí, desde el conjunto, nos movemos hacia otra realidad menos distópica. Con tiempo para dedicar a lo que a cada cual le gusta, tiempo que pasar con quienes queremos, tiempo que dedicar a un trabajo que, siendo trabajo, nos guste lo más posible, o que incluso sin gustarnos demasiado, nos permita tener tiempo y energía para nosotros, por horarios y dinámicas laborales adecuadas y sanas. Utopía?
Esta semana no pensaba contar nada porque la leí según llegue, me quedé pensando en ella y la vida me pasó por encima (vaya, algo que tiene que ver mucho con lo que decís). Pero llevo dos tardes entre semana en las que he tenido ***tiempo libre*** y las he podido invertir en autocuidado (en mi caso, adecentar un poco más la casa, hacer gestiones que tenía pendientes e incluso ver un capítulo más de esa serie que tengo a medias).
Sobrevivir tiene como segunda acepción "Vivir con escasos medios o en condiciones adversas", y cada vez hay más gente en esa rueda... y sin tiempo siquiera para pensar en ello. Gracias por vuestra reflexión semanal.
Por cierto, con la viñeta de @mariconpatascontierra me habéis dado de lleno.
Tristemente, me veo reflejado en vuestras palabras, no solo por lo que hemos hablado sino por todo lo que me guardo hasta que una incisión inesperada agrieta las rutinas de mi supervivencia y por esa rotura escapa todo. A presión. La jornada partida, la ausencia de tiempo real que dedicar a las cosas que me ilusionan, la falta de energía para buscar esas ilusiones que terminan por convertirse en tareas, la duda entre cuánto aguantaré en este curro cada día más estúpido y si estoy dispuesto a renunciar a este dinero. Todo en pendiente, pospuesto, ya leeré esto cuando tenga tiempo, ya haré esto cuando me vaya de casa, ya nos veremos. Darle largas a la vida es supervivencia, porque mirarla de frente es combatir y no todos estamos preparados para eso. No tendría que ser todo una batalla. Por suerte, estoy rodeado de personas que me quieren a pesar de las distancias, de llegar tarde, porque en el fondo estamos todas igual. El amor nos salva, siempre.
Últimamente me cuesta mucho escuchar música, pero siempre me entra fácil el BBO de Hoke (un disco que es casi un speedrun, capaz de hacer mucho con muy poco, que alterna energía y estrés con pausas para tomar aliento), y no puedo evitar pensar en la canción "Automático", cuando dice eso de "necesito tiempo, dámelo en metálico". Dejo mi pequeño aporte musical y os recuerdo cuánto os quiero y cuánto me gusta leeros. Siempre os siento cerca, pero así más todavía.
Cuando todo falla, ahí están las Bich(ot)as.
Justo hoy una amiga me decía "ahora entiendo cuando éramos pequeñas y los mayores nunca veían a sus amigos, estaban siempre cansados y no tenían tiempo". Y no, no es por ser mayores, es como decís y como he leído en comentarios, que este modo de organización social obliga a desconectarse a veces de una misma para poder cumplir con esa productividad, con eso que se espera de nosotras, eso que hemos integrado como nuestro pero en realidad es mentira. Entonces, paramos, respiramos, nos autocuidamos y cuidamos entre nosotras, y desde ahí, desde el conjunto, nos movemos hacia otra realidad menos distópica. Con tiempo para dedicar a lo que a cada cual le gusta, tiempo que pasar con quienes queremos, tiempo que dedicar a un trabajo que, siendo trabajo, nos guste lo más posible, o que incluso sin gustarnos demasiado, nos permita tener tiempo y energía para nosotros, por horarios y dinámicas laborales adecuadas y sanas. Utopía?
Esta semana no pensaba contar nada porque la leí según llegue, me quedé pensando en ella y la vida me pasó por encima (vaya, algo que tiene que ver mucho con lo que decís). Pero llevo dos tardes entre semana en las que he tenido ***tiempo libre*** y las he podido invertir en autocuidado (en mi caso, adecentar un poco más la casa, hacer gestiones que tenía pendientes e incluso ver un capítulo más de esa serie que tengo a medias).
Sobrevivir tiene como segunda acepción "Vivir con escasos medios o en condiciones adversas", y cada vez hay más gente en esa rueda... y sin tiempo siquiera para pensar en ello. Gracias por vuestra reflexión semanal.
Por cierto, con la viñeta de @mariconpatascontierra me habéis dado de lleno.
¡hasta la próxima!